Los free walking tours en Cuba han ido agarrando vuelo y hay varias opciones entretenidas y originales, no sólo en La Habana, para disfrutar. Me gusta mucho esta modalidad de tours porque en general te permiten conocer lo mejor de las ciudades en pocas horas, caminando y como la modalidad de trabajo de los guías es por propinas, suelen esforzarse en hacer que tengas una excelente experiencia. Free walking tour por La Habana Colonial: este tour sale todos los días a las 10 de la mañana desde la Fuente de La India, frente al hotel Saratoga y dura 3 horas. Para reservar tu cupo a este tour puedes hacerlo entrando aquí. Free walking tour nocturno por el ritmo de La Habana: Este tour comienza a las 20 horas todos los días, frente al hotel Saratoga y dura 4 horas. Este tour es para quienes quieren empaparse del ritmo y sabor de La Habana, haciendo un recorrido por 5 distintos bares a probar tragos tradicionales no incluidosal tiempo que disfrutan de la salsa en vivo y por qué no, tiran unos pasos de baile. Si te animas con este tour, aquí puedes reservar tu cupo para no quedar fuera. Este tour comienza todos los días a las 10 de la mañana frente al hotel Grand Iberostar Trinidad, ubicado en el centro de la ciudad. Si te animas con este free tour aquí te dejo el link para que reserves tu cupo.
Se cree que es el año en el que se construyó o en el que fue consagrado el basílica. Actualmente depende del Obispado de Lugo y se utiliza como iglesia parroquial. Este santo gallego nació en la parroquia de Albelos Pontevedra en el año Pero su tío, el obispo de Tui, murió antes de pagar su rescate.
Toma una taza de café, té o tu bebida favorita. Entre dos lunas Sharon Creech Mientras atraviesa en auto las Colinas Negras, Sal no puede evitar pensar en su madre desaparecida. La ladrona de libros Markus Zusak Erase una vez un pueblo adonde las noches eran largas y la muerte contaba su propia historia. Erase una vez una novela preciosa, endemoniadamente humana y emocionante. Erase una tiempo un mundo imaginario donde encontrar abrigo y poder, a la vez, enterrar razón alguna para llorar.
Capítulo 1 Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo. Todos los años, por el mes de marzo, una familia de gitanos desarrapados plantaba su carpa alambrada de la aldea, y con un grande alboroto de pitos y timbales daban a conocer los nuevos inventos. Melquíades, que era un hombre cabal, le previno: «Para eso no sirve. Durante varios meses se empeñó en demostrar el acierto de sus conjeturas. Exploró palmo a palmo la territorio, inclusive el fondo del río, arrastrando los dos lingotes de hierro y recitando en voz alta el conjuro de Melquíades. Cuando José Arcadio Buendía y los cuatro hombres de su expedición lograron desarticular la armadura, encontraron dentro un esqueleto calcificado que llevaba colgado en el cuello un edículo de cobre con un rizo de mujer. En marzo volvieron los gitanos. Sentaron una gitana en un extremo de la aldea e instalaron el catalejo a la entrada de la carpa.
Jueves. Otros úrico. Expectativas a hoteles. Salidas a domicilio.