Si es un lío de una noche no hay problema, pero si una mujer se convierte en 'la otra' la cosa cambia. Los sentimientos comienzan a jugar un papel fundamental en la relación, y el hecho de compartir al hombre comienza a pesar. Hay muchas féminas que no aguantan su condición de concubinas y deciden acabar con la relación, pero hay otras, la mayoría, que esperan meses, incluso años, a que su amado deje a su pareja por ellas, algo que casi nunca sucede. Soy la amante Un sufrimiento que conoce bien una amante clandestina anónima, quien ha decidido escribirle una carta abierta a la novia del hombre que ambas comparten. La misiva ha sido publicada en 'Cosmopolitan'.
Hablan de proyectos logreros, de meriendas en heredades, de un sermón, de paseos bajo el refugio de los olmos del camino. Son viejos, como el enfermo, y tienen fortaleza, estrépito en la risa y fuman. El lisiado les mira iracundo, vuelto a su hosco silencio, porque sabe que no lo creen. Apartados en el baldío de una vidriera, dos jóvenes contemplan la noche que se pierde en un misterio de cendales pasados de luna. Lejos, bajo las nieblas, escintilan las luces reunidas, medrositas, de un pueblo del valle. Se ve un llano que desgrana lumbre de cristalera en el suelto pedriscal.
Por Carla Martínez Dantí. En unComo. Descubre algunos trucos para devolver la normalidad a tu vida y seguir tu rumbo con los pies en el suelo. El amor, a veces, es adictivo, como las drogas, y por eso nuestro cerebro se activa galeote de tal influencia.