Nuestros cuerpos producen lubricación natural. Sin embargo, puede suceder que, por diversos motivos ya sean disfunciones físicas o emocionales, falta de excitación o estimulación previano se llegue a producir lubricación natural adecuadamente, sobre todo en el caso de las mujeres. Igualmente, aunque no exista ninguno de estos problemas, los lubricantes también pueden convertirse en unos grandes aliados en tus encuentros sexuales. Seguro que has oído hablar de los lubricantes de sabores, de base al agua, de base de silicona… y una gran infinidad de ellos. Lo que necesitas entonces es un lubricante de efecto calor.
Es verdad que existe una especie de tela que recubre al sexo rectal. El sexo anal doloroso NO es normal ni saludable. Con esto queremos decir, no es lo mismo adorar practicar el sexo anal porque hay un interés personal, que por boicot ejercida por parte de la galán sexual. Es un interés natural y delicioso que permite prepararse mental y físicamente para ese placer. Relajación muscular para sexo anal Como bien mencionamos anteriormente, es indispensable estar relajado antiguamente de practicar sexo anal. A través de los famosos ejercicios de Kegel que todas las personas, independientemente de su sexo biológico, pueden practicar. Se trata de apretar unos segundos la musculatura pélvica y luego soltar. Repite este ciclo hasta que tengas identificado cómo se siente contraer y blandear la musculatura pélvica.
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