Este tipo de TOC puede ser especialmente duro porque los niños suelen avergonzarse de tener pensamientos sexuales que no pueden controlar. Las obsesiones sexuales pueden presentarse de muchas formas diferentes. Por ejemplo, una adolescente puede estar obsesionada con la idea de que podría ser gay, aunque nunca se haya sentido atraída por otra chica. Otros chicos podrían preocuparse por hacer algo sexual sin consentimiento. Por ejemplo, podrían tener miedo de que tocar accidentalmente la mano de un amigo pueda ser tomado como un avance sexual. Algunos niños incluso se preocupan por cometer una violación o un incesto, no porque quieran o planeen hacerlo, sino porque les aterra la idea de que puedan hacerlo.
Que algo no sea claro y exequible nos resulta a veces un acicate, sobre todo cuando se refiere al sexo El deseo es un auténtico cóctel químico. Para las mujeres, sin embargo, depende de las fluctuaciones hormonales. Ellas suelen sentir una mayor inclinación a buscar encuentros sexuales durante el periodo de ovulación o incluso durante la regla. Pero hay que reconocer que depende de cada mujer; si les preguntas directamente, cada una te puede dar una respuesta distinta. Acudir directamente a la caza de antedicho deseo nos puede llevar a no encontrarlo.
Por lo general, lo morboso se asocia a lo sexual. De ahí que se mencionen las miradas y las insinuaciones morbosas. Sin embargo, también es usual que se califiquen como morbosas otro tipo de conductas. Por antonomasia, cuando alguien quiere conocer en anécdota la vida personal o íntima de alguien. Por extensión, definimos como morbo todo aquello que nos remite a la enfermedad mental. Ahora biem, debemos tenerlo claro: no siempre es así.